lunedì, febbraio 06, 2006

Memorias de una Geisha.


“Chiyo” hija de una familia empobrecida pesquera es llevada a la lejana ciudad de Kyoto y vendida en esclavitud a una casa renombrada de geishas. Inicialmente renuente, “Chiyo” debe finalmente por un motivo de vida, inventar y cultivar la imagen de como ser una geisha deseable para sobrevivir.

A través de ella los ojos, nos dan una vista del antiguo y estricto mundo de la geisha y de las vidas de las mujeres que aprenden y practican sus rigurosos artes. Detrás de su fachada de belleza resulta ser un lugar severo en donde las mujeres compiten desesperadamente para el favor de los hombres, donde la virginidad de una joven es dada al mejor postor, donde casi no existe la confianza personal, y donde ninguna mujer puede permitirse incluso soñar sobre amor o felicidad.

Durante la vida de “Sayuri”, Japón pasa con una serie de traumas y de cambios culturales sin precedente: la gran depresión, la guerra, la ocupación americana, el aislamiento de Japón está finalmente practicado una abertura y Sayuri debe reinventarse de nuevo y su manera de la existencia.

Mucha gente en el oeste piensa en geishas simplemente como en prostitutas. Pero en sus letras “Chiyo” menciona que: "El entrenamiento de un geisha es una trayectoria ardua. Sin embargo, llenan a esta persona humilde de la admiración para los que puedan modificar su sufrimiento y hacer grandes artistas”. La palabra geisha en hecho deriva de la palabra japonesa para el arte.

Mientras que la “Sayuri” más vieja narra sus memorias, casi se parece como si ella presenta a “Chiyo” y “Sayuri” como dos diversas personas en si misma, actualmente ella sigue entrenando a un grupo de jóvenes para convertirlas en geishas.